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Por John Hughes – Las reexpresiones van en aumento, o: ¡Se eliminan!
Documento original: Restatements on the rise, or: screened out! [21/02/2025]
Block Journal (entre varias otras fuentes) recientemente publicó lo siguiente:
El número de compañías de Estados Unidos forzadas a retirar los estados financieros a causa de errores de contabilidad ha aumentado hasta alcanzar un máximo en nueve años, planteando preguntas acerca de por qué los errores están pasando desapercibidos por los auditores.
En los primeros 10 meses de este año, 140 compañías públicas les dijeron a los inversionistas que los anteriores estados financieros no eran confiables y que tuvieron que reemitirlos con cifras corregidas, de acuerdo con datos de Ideagen Audit Analytics.
Esto representa un aumento de 122 con relación al mismo período del año anterior y más del doble que la cifra de hace cuatro años. Las denominadas reexpresiones por reemisión cubren los más graves errores de contabilidad, ya sea a causa del tamaño del error o a causa de que el problema es de particular preocupación para los inversionistas.
El aumento de las reexpresiones era “preocupante”, dijo Sandy Peters, jefe de defensa global del CFA Institute, una asociación profesional de inversionistas. “Las reexpresiones le dicen a Ud. algo acerca de la administración de la compañía, y acerca de los controles internos de la compañía”.
Una serie de compañías de perfil alto han confesado errores de contabilidad en los recientes meses. El minorista Macy’s dijo que uno de sus contadores ocultó al menos $132mn al falsear deliberadamente los gastos de envío. Archer Daniels Midland, el comerciante de materias primas agrícolas, despidió a su director financiero luego de encontrar que utilidades en su negocio de crecimiento rápido de nutrición, habían sido infladas de manera inapropiada. Symbotic, un grupo de software de almacenes respaldado por SoftBank y Walmart, reexpresó sus resultados financieros históricos no una sino dos veces el mes pasado.
… Jeffrey Johanns, anterior socio de PwC que enseña auditoría en la University of Texas, dijo que las razones para el repunte en las reexpresiones podrían incluir la complejidad de los nuevos estándares de contabilidad, que incluyen cómo contabilizar las pérdidas de crédito esperadas, y el ‘incrementado uso de instrumentos financieros no fácilmente caracterizados ya sea como patrimonio o como deuda’, que las compañías están haciendo.
El aumento del trabajo remoto en los años posteriores-al-Covid también podría ser un culpable, dijo. “Los auditores necesitan sentarse frente al cliente, recorrer el lugar y el almacén”, dijo. “Demasiado trabajo realizado de manera remota podría llevar a más pobre calidad de la auditoría”.
Aquí miramos el caso de Macy’s, y la subsiguiente presentación de reportes parece confirmar que se trata de una peculiaridad. Tal y como fue reportado por NBC News: “El empleado (responsable) le dijo a los investigadores que el error inicialmente fue cometido en la contabilidad de los gastos de entrega de paquetes pequeños, y luego la persona cometió errores intencionales para ocultar el error, de acuerdo con fuentes familiarizadas con la investigación”. Dado que el impacto parece haber sido apenas material desde la mayoría de las perspectivas, si es que lo es, el principal problema de Macy’s parece haber sido pura mala suerte. Dejando eso a un lado, las explicaciones de Johanns pueden tener alguna validez, particularmente el punto relacionado con el trabajo remoto, que nos lleva a un problema más amplio sobre la cultura de la auditoría. No sorprende que el artículo enmarque todo esto como un problema, citando a la Public Company Accounting Oversight Board argumentando que “su régimen de inspección más estricto luego de la pandemia comenzará a mostrar resultados en los próximos años”. Pero cualquier endurecimiento de ese tipo del régimen de inspección también amenaza agravar los desafíos de reclutamiento y retención que tiene la profesión, poniendo así una mayor presión sobre la calidad de la auditoría en el largo plazo.
Mi punto de vista, tal y como lo he expresado antes, es que cierto número (todavía bajo en el esquema de las cosas) de reexpresiones sería mejor visto como una característica de la auditoría, más que como un error, como ellos dicen. No hay línea de trabajo de conocimiento en el cual no se cometan errores (incluso los mejores médicos tienen la ocasional operación fallida; incluso los mejores abogados juzgan mal un caso o una estrategia, etc., etc.) así que me sorprende la casi única propensión de la profesión de auditoría a constantemente castigarse a sí misma. Por supuesto, eso no quiere decir que tales fracasos deban ser simplemente ignorados, cada uno tiene su propio tipo de experiencia de aprendizaje, pero después de un tiempo, de manera repetida la “dureza” del régimen de supervisión comienza a parecer una especie de masoquismo desenfrenado.
Sea o no que el punto de Johanns acerca del trabajo remoto explique de manera específica cualquiera de las reexpresiones recientes, parece ampliamente verdadero que el trabajo remoto no está bien alineado con la obtención del tipo de saber-cómo que proviene de la observación cercana, de la conversación digresiva prolongada con contacto visual y la verdadera presencia humana, de dejarse arrastrar por cosas que de otra manera uno se perdería. Recientemente cité los comentarios del SEC Chief Accountant Paul Munter de que “el comportamiento está determinado en gran medida por las personas que están a su alrededor, a las que algunos se refieren como el ‘estado de ánimo en el medio’ o el ‘zumbido en el fondo’. Pero es difícil ser positivamente influenciado y realizar cambios positivos cuando uno pasa la mayor parte del tiempo sentado en casa, y captar cualquier resto del humor y del zumbido que llegue a través de la distancia. Uno de los muchos desafíos que actualmente enfrenta la profesión es el de conciliar el valor de la presencia y la inmediatez con el problema práctico de una fuerza de trabajo joven acostumbrada a ver el mundo ampliamente a través de sus pantallas.
Las opiniones expresadas son solamente las del autor.
Esta traducción no ha sido revisada ni aprobada por el autor.